En un lugar lleno de gente, Tipa, decidió desatar el caos empujando a su novia Terry por unas escaleras. ¡La gente alucinó! Los ojos se abrieron como platos y los corazones se aceleraron, ¡parecía que estábamos en una película de acción!

Pero espera, la trama se puso al revés. Resulta que todo era una broma cuidadosamente planeada. Terry, la cómplice perfecta, se levantó de un salto y empezó a reír a carcajadas. ¡Vaya susto se llevaron todos! La multitud pasó de la preocupación a la risa en un abrir y cerrar de ojos.